sábado, 20 de junho de 2020


Pa' Bravo yo !!!
Estábamos en 4to. año, ya éramos aspirantes, la tradición leonciopradina se completó con tres promociones con el ingreso de la 39 promoción en aquel año de 1983. La 9na. sección y casi la mayoría de la XXXVIII a mitad de año tuvo a los "matones" de la 37 como monitores, asignados en esa tarea por el acto de "insubordinación" y falta de respeto hacia sus técnicos. La 9na. sección tuvo a Antonio Vega como monitor, un moreno panameño a la que los pequeños componentes de la sección difícilmente podíamos empalarnos, los cadetes panameños por décadas han estudiado y han sido parte de la historia de cada promoción. Siempre destacando en deportes como atletismo, básquet y voley y otros deportes de las diversas selecciones del CMLP. También podían destacar en Box, por tener un potente estilo físico. El monitor Vega, con su forma de ser era respetado en su promoción. Gustaba que nuestra sección esté siempre regla y formada en el patio de Armas cada vez que pasábamos revista a la hora del desayuno, almuerzo o comida.
Para nuestra fatalidad la 9na. sección formaba al lado de la 1ra. de técnicos de la 37 en donde estaban los más "matones" y rabiosos, para no decir abusivos, había una línea blanca que dividía el límite de cada promoción. Nosotros llegábamos y formábamos esperando el parte respectivo pero la 1ra de la 37 llegaba y nos empujaban gritando con su clásica frase "perros miserables salgan de ahí..." haciendo que nuestra formación se desordene, lo que no era válido para el monitor al mando. Había un técnico apellidado Bravo Cárdenas, siempre era el que ocasionaba ese desorden, para él ya era costumbre de hacer ese tipo de maldad. Era la hora de almuerzo todo el batallón formado y el jefe de batallón pidiendo el parte. El monitor Vega comienza a contar columna por columna cuando Bravo Cárdenas empuja a los cadetes que estaban en las primeras columnas derribándolos y riéndose apoyados por los demás de su sección, cuando aparece como un león desde la parte de atrás de la formación el monitor Vega y dice : "Qué tienes huevón por qué haces eso a mí sección..." y Bravo Cárdenas todo arrogante le responde " te arañas por estos perros de mierda..." y Vega responde: "Están a mi mando y por eso exigió respeto"...ya,ya,ya, pasa huevón, réplica Bravo Cárdenas. Nosotros mirando atónitos todo lo que estaba sucediendo y la sección de técnicos también de espectadores. Vega le responde : "oye huevón de mierda, no voy a permitir que me faltes el respeto delante de todos". Y se encaran, hay un amago de pelea pero son separados por su sección. El capitán de año llama la atención de todos y se normaliza. Bravo Cárdenas no se queda callado y lo mira a Vega y dice: "No te tengo miedo" y Vega responde con una pequeña sonrisa: "Ahhh, machito eres.. ya vas a ver..."murmurando nos pone en orden y hablando "ya va a ver ese huevón, cree que por su apellido se cree matón...pa' bravo yo !!!".
Pasamos rancho como de costumbre pero con la inquietud de que terminado el almuerzo la 1ra de técnicos y demás cadetes chismosos iban en grupo hacia los malacates para presenciar la pelea entre Antonio Vega y Bravo Cárdenas.
Efectivamente, sucedió el descenlace, yo no estuve presente pero por los relatos que escuché de cadetes de otros años que presenciaron la pelea dijeron que Bravo Cárdenas comenzó a dar varios golpes que fueron asimilados por Vega, pero el panameño no se quedó atrás y le dio una clase de boxeo, repartiendo golpes dignos de un boxeador profesional a su rival que finalmente cayó al suelo con la cara magullada. Los técnicos de su sección levantaron a Bravo Cárdenas y lo llevaron a la enfermería para que le curen las heridas en el rostro, Antonio Vega acompañado de sus compatriotas panameños lo acompañaron para después ducharse y cumplir con su papel de monitor. En la formación del parte de pasar rancho de noche no vimos en la formación de técnicos a Bravo Cárdenas. Nadie mencionó nada y nos quedamos callados.
Al día siguiente en la formación para tomar el desayuno e ir a las aulas, como era la costumbre cuando estábamos formando vimos aparecer la figura de Bravo Cárdenas, con el rostro hinchado y con vendas y espadadrapo en el pómulo y en la ceja derecha, nos miraba y con media boca decía: "qué me miran carajo". El monitor Vega se asomó y con la mirada lo calló para esperar dar el parte de la sección y proceder a dejarnos pasar el rancho. En las salas de aula comentábamos matándonos de risa al ver cómo había quedado Bravo Cárdenas, sin querer Antonio Vega había actuado como nuestro vengador por todas las maldades hechas por un tipo que nos superaba en edad, peso y talla y que había recibido su justo merecido por su altanería sin igual.

4 comentários:

Beto humo disse...

Primo, no sabes con cuanta ansia y desespero lei este pasaje...BRAVO,!

Beto humo disse...

Saludos Primazo......
un abrazo Humberto Aleman (Beto humo)

Carlos Matos disse...

Asi es Tony Vega no se deja amendretar de nadie y odia las injusticias el abuso del más fuerte hacia el más débil. Recuerdo cuando tenía 6 años me defendió de un grandulon de 16 años que se notaba de mi. Le dio una tunda de golpes. En otra ocasión defendió vehemente su bandera y uniforme ante un soldado puertorriqueño que post invasión pretendió burlarse de nuestro símbolo patrio y denigrar la imagen de los hombres de uniformes de Panamá.

Rincón de Kelisidian disse...

Muy bueno